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No te pierdas la oportunidad de probar platos tradicionales

Gastronomia

ANDUJAR, PARAÍSO GASTRONÓMICO

El actual edificio del Ayuntamiento de Andújar, que hoy conocemos como centro de gobierno local, tiene sus raíces en una historia rica y diversa. Entre 1620 y 1631, este majestuoso edificio fue construido originalmente como una Casa de Comedias, desempeñando este papel hasta 1680.

Fue entonces cuando, a instancias de la monja Trinitaria Sor Lucía Pérez de Yáñez, el concejo decidió suspender las representaciones teatrales en la ciudad. La razón principal de esta medida fue combatir una terrible epidemia, la cual, en ese año de 1680, cobró la vida de seis mil personas según las actas capitulares.

Desde ese momento, el edificio fue destinado a diversos usos, en su mayoría relacionados con el alojamiento de tropas, lo que provocó su deterioro a lo largo del tiempo.

Un legado de las ancestrales monterías

Carne de monte

Deléitate con la «Carne de Monte»: un legado de las ancestrales monterías que se remontan a la Edad Media, tras la reconquista de la ciudad por Fernando III. En virtud de su ubicación, con más del 75% de su territorio abrazado por las montañas, Andújar se sumerge en una tradición culinaria que rinde homenaje a las carnes de ciervo, gamo y jabalí.

Estas carnes requieren una preparación meticulosa para alcanzar la perfección. Cocidas con esmero, se vuelven tiernas y adquieren un sabor excepcional gracias al uso de especias como el pimentón, el azafrán, el ajo molido, el laurel, la pimienta y la sal gorda. El toque distintivo proviene del orégano y el aceite de oliva virgen, que realzan los sabores naturales.

Para recrear esta experiencia culinaria auténtica, se emplean las tradicionales «perolas» o cacerolas populares, una costumbre que se mantiene en algunos rincones de la ciudad. Sumérgete en la riqueza histórica y el sabor apasionante de la «Carne de Monte» en cada bocado, una celebración de la naturaleza y la tradición gastronómica de Andújar.

A partir de 1787, se consideró trasladar el Ayuntamiento a la antigua Casa de Comedias debido al mal estado de la casa consistorial en la Plaza de Santa María. La remodelación del edificio fue un proceso complejo, y el costo superó ampliamente el presupuesto original. El autor del proyecto de remodelación fue Juan de Mata Martínez, un arquitecto local y profesor de arquitectura. La remodelación alteró los miradores originales, incorporando una fachada neoclásica y una sala contigua que serviría como residencia del corregidor.

En el interior, se conserva el hermoso patio original de dos pisos. Los arcos de la planta baja descansan sobre columnas de orden toscano, mientras que en la planta noble, las columnas carecen de plinto. Este diseño se refleja en la fachada del edificio y en el atrio del Palacio de los Segundos de Cárdenas.

Un elemento destacado del edificio es la magnífica escalera de «estilo imperio» construida a finales del siglo XVIII. El espacio cúbico de la escalera está rematado por una bóveda elíptica sobre pechinas con una linterna en la parte superior, y está decorado con un hermoso zócalo de azulejos que datan de principios del siglo XX. Un lienzo de 1780 en el que se representan los escudos de armas de Carlos III, la ciudad y el corregidor de la época adorna la escalera. Una impresionante lámpara de cristal de roca, un regalo del conde de la Quintería durante su mandato en la alcaldía durante la dictadura de Primo de Rivera, completa la decoración.

El edificio ha experimentado una profunda remodelación entre 1997 y 2000, restaurando su esplendor original y agregando un nuevo anexo en la parte trasera, que combina funcionalidad, simplicidad de formas y continuidad del espacio. Esta combinación de historia y modernidad lo convierte en un punto de referencia emblemático en el corazón de Andújar

oldtown, in hungary

Aceitunas de Andújar

Las «Aceitunas de Andújar», un auténtico tesoro culinario, destilan la esencia de la tradición hogareña desde los Santos hasta la Epifanía del Señor. Estas aceitunas, deshuesadas, machacadas o rajadas, se suavizan con agua de pozo y se aderezan con la magia del ajo, el orégano, el pimentón y el vinagre. Este adobo ancestral es un auténtico tributo al sabor campestre y tradicional. Si deseas una experiencia más serrana, un aliño compuesto de hinojo, tomillo y ajo potenciará ese sabor característico de la Sierra.

En estas delicias se esconde el secreto heredado de generaciones pasadas, un sabor que viaja siglos atrás y entrelaza los frutos de la Campiña con los aliños de la Sierra y los campos. Cada bocado es un viaje al pasado, una conexión con la esencia de Andújar y sus sabores únicos.

Flamenquin

Conoce su historia: como, cuando, donde, …. te sorprenderá.

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